Una habitación para dos niños: cómo organizar mejor el espacio y los muebles

¿Dos hijos y un solo dormitorio para compartir? He aquí algunos consejos para crear una habitación para dos de forma sencilla y personalizada

Para cada niño su propio juego de dormitorio es un lugar un tanto mágico, un lugar en el que vivir diferentes momentos del día, no sólo relacionados con la hora de acostarse, sino también con momentos de juego y de estudio.

En sus propios dormitorios, los niños pueden dormir a pierna suelta, leer, jugar e inventar historias maravillosas, sintiéndose piratas o princesas siempre que lo deseen.

De hecho, desde el momento en que empiezan a dormir solos, el los niños desarrollan una relación muy especial con su dormitorio, que consideran un refugio seguro y un punto de referencia en muchas ocasiones diferentes.

Es entonces cuando tener un dormitorio amueblado lo más seguro y cómodo posible, quizá alegre y juguetón sin olvidar un toque de estilo, se convierte en un requisito más que normal.

Sin embargo, ocurre muy a menudo tener más de un hijo y, por tanto, tener que organizar lo mejor posible los distintos espacios de la casa, sobre todo cuando los metros cuadrados disponibles no son muy grandes. Cada niño debería tener una habitación propia, para expresar mejor sus preferencias en cuanto a la disposición de los muebles, los juegos, etc., pero cuando esto no es posible y se ve obligado a tener compartir la misma habitación con dos niñosentonces resulta esencial organizarlo todo de la mejor manera posible.

¿Pero cómo? ¿Cuál es la mejor manera de dividir el espacio para que los niños tengan cada uno su rincón ideal de la habitación y también algo de intimidad?

¡Descubrámoslo juntos en este artículo!

Una habitación para dos: cómo conciliar gustos y necesidades

La de tener que utilizar el mismo dormitorio para sus dos hijos es una necesidad muy común: la solución, a menos que decida mudarse a una casa más grande, es obviamente subdividir espacios inteligentemente, tratando de conciliar las necesidades de ambos niños.

Si se trata de dos niñas o dos niños, el problema es fácil de resolver porque, a pesar de las diferencias de carácter, sin duda se puede aspirar a un mobiliario que satisfaga los gustos de ambos. La cuestión se complica, sin embargo, en el caso de tener que compartir habitación, son un niño y una niña.

En este caso, es necesario adaptar la sala intentando crear un espacio diferente para cada uno que refleje sus gustos y necesidades.

En general, cuando dos niños o dos niñas o un niño y una niña tienen que compartir el mismo espacio, hay que intentar complacer a ambos creando, incluso visualmente, dos habitaciones en una.

Lo más difícil, por supuesto, es mantener una cierta homogeneidad de estilos para no crear demasiada brecha entre las dos partes de la habitación y no hacer que parezca un batiburrillo de estilos diferentes, privándola así del toque justo de estilo que nunca debe faltar.

Esto puede lograrse, en primer lugar elegir muebles de color claroLo mismo para las dos partes de la habitación, diferenciándolas después con pequeños detalles de estilo como los accesorios: en la habitación de una niña, por ejemplo, puede elegir bonitos pomos en forma de flores o mariposasoptando quizás por colores diferentes para las dos niñas, pero manteniendo siempre una línea estilística uniforme y agradable.

En cambio, si dos chicos comparten habitación, uno puede optar por pomos en forma de lindos sonría, ovni o formas divertidas como pacmandejándoles elegir los complementos que más les gusten.

Lo mismo puede hacerse cuando dos niños -un niño y una niña- se alojan en la misma habitación y, por tanto, necesitan espacios visualmente diferentes. En este caso también se puede jugar mucho con los colores, destinando a la zona infantil algunos accesorios en tonos rosas, como por ejemplo asas de corazón o agradable pomos animaliery haga lo mismo con la parte reservada al chico, pero declinando los mismos complementos en tonos amarillos o azules.

 

Para hacer que la habitación sea aún más cómoda y personalizada, puede centrarse en el papel pintado cubrir la pared adyacente a cada cuna, para diferenciar aún más los espacios reservados a cada niño, dejando la elección del tema a los niños y eligiendo después mantas y cojines acordes con el tema, pero siempre intentando conservar el máximo posible armonía cromática y visual entre las dos partes.

Finalmente siempre es mejor dos escritorios separadas para que los niños puedan dibujar, estudiar o escribir tranquilamente sin tener que relevarse entre ellas, mientras que para un elemento adicional de personalización, puede añadir bonitas perchas como Varilladiversos tonos o estampados.

De este modo, la habitación, a la vez que acoge a dos niños, tendrá espacios bien definidos y siempre armoniosos entre sí, capaces de satisfacer a los más pequeños, pero también las exigencias de estilo de sus padres.